Descreía de la lentitud de las circunstancias en el tiempo,
renunciaba a las pausas y pasos a un mismo caminar,
sin saber que es ahora el tiempo quien me ofrece una
lección.
Para tener tu amor, la perseverancia, la paciencia y la
fortaleza, deben guiar los acontecimientos sucesivos.
Yo estoy dispuesto a vivir,
lo que ha de ser… será,
pero bajo el manto sabio de la historia,
que nos irá diseñando el camino de coincidencias y
encuentros,
de acuerdos y complicidades que sólo el tiempo podrá
develar.
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